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El Amor por los Gatos que se Convirtió en una Misión
La Dra. Ana Milena, una veterinaria con más de 15 años de experiencia en medicina felina, siempre tuvo una misión clara: mejorar la calidad de vida de los gatos. En su consulta, veía un problema recurrente que afectaba a cientos de felinos: la deshidratación crónica.
Sus pacientes llegaban con problemas renales, infecciones urinarias y malestar general, todo debido a un simple pero grave hábito: los gatos no bebían suficiente agua. Valeria sabía que los felinos, por naturaleza, tienen un instinto de caza que los hace beber solo de fuentes en movimiento, pues en la naturaleza el agua estancada puede significar peligro.
Un día, un caso cambió su vida. Milo, un hermoso gato de 8 años, llegó a su clínica con un diagnóstico grave de insuficiencia renal. Su dueña, Ana, estaba destrozada. "Siempre le ponía agua limpia en su plato, pero nunca tomaba suficiente", le dijo con lágrimas en los ojos. A pesar de los tratamientos, Milo no resistió.
Ese día, Valeria entendió que no bastaba con recomendar a los dueños que ofrecieran más agua a sus gatos: había que cambiar la forma en que los gatos bebían agua.
Así nació Laurior. Inspirada en la naturaleza felina y en la necesidad de prevenir enfermedades, Valeria se asoció con diseñadores e ingenieros para crear fuentes de agua innovadoras, diseñadas exclusivamente para incentivar el instinto natural de los gatos a beber más agua.
Cada detalle fue pensado con amor y conocimiento: agua siempre en movimiento, materiales seguros y fáciles de limpiar, y un diseño silencioso que no asusta a los gatos.
Hoy, Laurior no es solo una marca, es el resultado de años de dedicación, ciencia y amor por los felinos. Porque cada gato merece una vida larga, saludable y llena de bienestar.